Casa centenaria preciosa, escaleras de madera, zonas de estar amplias

Sería genial que mejoraran la señalización de normas para mascotas!!! noté que el aparcamiento gratuito es un chiste, solo hay espacio para 4 o 5 coches, ¡no entra todo el mundo!!! Las interacciones con la anfitriona deberían ser más amables, ¡su tono es muy chulesco!!!

Cama cómoda e anfitriones encantadores. O fillo é un verdadeiro galeguín, simpático como el que máis. Moita calidez e atención, a cinco minutos da cova. Se perdes a noción do tempo, non pasa nada, aquí sentes que estás na casa dos amigos.

Un estilo auténtico que te transporta a épocas pasadas, con un ambiente acogedor y una limpieza notoria en todos los rincones. Los dueños son encantadores y hacen que te sientas como en casa, además de ofrecer una zona de barbacoa muy agradable.

Las habitaciones podrían beneficiarse de mejoras en el mobiliario para mayor confort, así como una atención más personalizada durante la estancia.

Disfruté de la comodidad de estar a menos de cinco minutos caminando de la cueva de Altamira y del museo del tiempo. Las habitaciones son amplias y luminosas, con un toque rústico que te transporta al pasado. El ambiente acogedor y el encanto de la decoración hicieron de mi estancia una experiencia encantadora.

Parking limitado.

Ideal para parejas que buscan tranquilidad

Las habitaciones son amplias y luminosas, con ese toque rústico que te transporta al pasado. Además, los dueños Raúl y Angela son un encanto, te hacen sentir en casa y te ofrecen usar la barbacoa, aunque nosotros no la aprovechamos.

No era barato, pero todavía estuvo dentro de lo aceptable.

cerca de la cueva de altamira y el museo del tiempo

Disfruté de la comodidad de estar a menos de una caminata de cinco minutos de la cueva de altamira y del museo del tiempo, lo cual hizo mi estancia muy placentera y fácil para explorar la zona a pie. además, la atención fue amigable y te da la sensación de estar en casa tras un día lleno de descubrimientos.

Disfrutamos de la opción de desayunar en el lugar, muy conveniente para salir a explorar. La habitación era amplia y luminosa, lo que hizo nuestra estancia más agradable.

Tuvimos problemas con las normas de la mascota y la falta de espacio de aparcamiento, además de una interacción poco amable con la anfitriona que no fue del todo agradable.

los anfitriones son realmente amables, y su hijo es muy simpático. la habitación no tenía buena insonorización.

La habitación no estaba insonorizada, se escuchaban ruidos de la carretera y de otros huéspedes, lo que dificultó el descanso. Además, la cama era pequeña y la entrada de luz por la ventana del techo no se podía controlar bien. Sin embargo, el desayuno era práctico y se podía disfrutar en el lugar, lo cual resulta conveniente para explorar los alrededores.

Disfruté de la tranquilidad del entorno y el encanto de la decoración. El desayuno era delicioso, con una variedad de opciones que me dejaron satisfecha cada mañana. Además, el servicio tuvo un toque personal que hizo que me sintiera como en casa.

La habitación era algo pequeña.

Increíble! Casa centenaria preciosa, ambiente acogedor, anfitriona encantadora.